Dos policías nacionales fuera de servicio salvan la vida a sendos ciudadanos en intervenciones humanitarias

Dos policías nacionales fuera de servicio salvan la vida a sendos ciudadanos en intervenciones humanitarias

12/09/2023

En Gijón y San Sebastián

  • El primer hecho se produjo en la playa de Zurriola, cuando un agente destinado en la Comisaría Provincial de San Sebastián que hacía surf  tuvo que rescatar a una pareja de bañistas que luchaban sin éxito por llegar a la orilla
  • La mujer rescatada en el mar  reconoció al agente porque dos semanas antes la había atendido en la Oficina de Documentación de Extranjeros
  • La otra intervención se produjo en un club de golf de Gijón, cuando un policía destinado en la Comisaría de Irún realizó durante más de veinticinco minutos un masaje cardiaco a uno de los socios que había sufrido una parada cardiopulmonar
  • Según los médicos que atendieron a este hombre, un ciudadano suizo afincado en España, gracias a la actuación del agente y de otro socio del club la víctima salvó su vida sin secuelas irreversibles

 

Dos agentes de la Policía Nacional destinados en la Comisaría de San Sebastián e Irún salvan la vida, respectivamente, de un ciudadano en la Playa de Zurriola, en San Sebastián, y de un hombre en un club de golf de Gijón.

La primera intervención humanitaria se produjo en la Playa de Zurriola, cuando un agente que practicaba surf se percató de que una pareja que se bañaba a unos 30 metros de distancia de la orilla era incapaz de llegar a la misma por el gran oleaje y la fuerte corriente de arrastre que había. Ambos bañistas nadaban desesperadamente sin éxito, por lo que el policía y otros dos surfistas que estaban en la zona y también habían observado lo ocurrido, iniciaron el rescate nadando apresuradamente en sus tablas hacia ellos. Cuando los alcanzaron, los dos surfistas se ocuparon de asistir a la mujer, mientras el agente se dirigió hacia el hombre facilitándole su tabla de surf para que la usara como flotador. De esta forma y tras unos minutos muy largos de lucha contra las corrientes y el oleaje, tiró de la víctima hasta la zona este de la playa, donde las corrientes eran mucho menores,  logrando así salvarle. Haciendo lo mismo con la chica los otros rescatadores.

Una vez en la orilla y cuando la joven se dirigía hacia sus rescatadores para agradecerles su ayuda, reconoció al agente como el policía que la había atendido dos semanas antes en la oficina de expedición de documentos de extranjeros.

La segunda acción humanitaria tuvo lugar en un club de golf de Gijón, y se produjo cuando un empleado del mismo requirió con urgencia la presencia de alguna persona con conocimientos en primeros auxilios, debido a que uno de los socios yacía en el suelo en estado inconsciente y cianótico.

Ante la gravedad de la situación, un policía nacional destinado en la Comisaría de Irún que se encontraba en el lugar se dirigió rápidamente hacia la víctima y tras comprobar que no respondía a estímulos y evidenciar que estaba en parada cardiopulmonar, le aplicó, con la ayuda de otro socio del club y coordinados a través de la operadora del servicio de urgencias del 112, un masaje cardiaco durante veinticinco minutos, estabilizándolo hasta la llegada de la U.V.I. móvil, que lo trasladó al hospital de la localidad.

Por esta actuación, el agente recibió el agradecimiento por escrito de la Presidenta del Club de Golf y del propio afectado, un ciudadano suizo afincado en España que le comunicó que, según los médicos que le atendieron, su rápida asistencia le salvó la vida sin tener secuelas irreversibles.