La Guardia Civil pone a disposición judicial al propietario de varios caballos por su estado de abandono
22/07/2011
En el lugar fueron hallados dos cadáveres de equinos, uno de ellos ya enterrado, y cinco caballos más en extremo estado de delgadez
Al propietario de los animales, que apenas disponían de alimentos y agua, se le atribuye una falta contra los intereses generales recogida en el Código Penal
Agentes de la Guardia Civil de Murcia, en la denominada “OPERACIÓN BABIECA” desarrollada durante los últimos días, han puesto a disposición judicial a una persona identificada como J.H.M.; español, de 57 años de edad y vecino de Murcia, como presunto autor de una falta contra los intereses generales recogida en el vigente Código Penal. Se tarta del propietario de siete équidos que se encontraban en evidente estado de abandono en una finca cercada del término municipal de Molina de Segura (Murcia).
Los animales, que fueron hallados después de que un ciudadano comunicará su existencia a la Guardia Civil, apenas si disponían de agua ni alimento.
A la llegada de los agentes del SEPRONA, dos de los animales habían fallecido y uno de ellos ya había sido incluso enterrado en un foso excavado en la propia explotación equina. El otro cadáver se hallaba a la intemperie en las instalaciones de la cuadra.
Los cinco animales restantes, dos caballos y tres yeguas, presentaban un manifiesto estado de delgadez y carecían de toda documentación y de los preceptivos microchips para su debida identificación.
El propietario de la explotación equina, que no se encontraba registrada, manifestó a los agentes que el estado de desnutrición de los animales se debía a su actual incapacidad económica para poder mantenerlos debidamente alimentados.
En las actuaciones ha colaborado personal veterinario de la Dirección General de Ganadería y Pesca de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.
Los hechos han sido comunicados a la Autoridad Judicial y al Ministerio Fiscal por si el autor de los mismos pudiera haber vulnerado el Código Penal, que recoge como falta contra los intereses generales el abandono de un animal doméstico en condiciones en que pueda peligrar su vida o integridad.