El Museo Nacional Etnográfico echará a andar en Teruel

El Museo Nacional Etnográfico echará a andar en Teruel
<br/>

19/01/2009


El futuro Museo Nacional de Etnografía ya tiene sede en Teruel

 Ocupará un inmueble cedido por la Diputación Provincial, conocido como Antigua Casa de la Beneficencia
 El Museo, de titularidad estatal y adscrito al Ministerio de Cultura, estará regido por un Patronato

 

 

Y es que la etnografía histórica, la antropología cultural, como la llamaba Julio Caro Baroja, sabio, testigo y superviviente de otros tiempos, reclama una mayor presencia del análisis de nuestra diversidad cultural.

Es el momento para que el Museo Nacional de Etnografía inicie el mismo proceso de transformación seguido por otras grandes instituciones internacionales, como el Museo de las Civilizaciones de Marsella, procedente de las antiguas colecciones del Museo Nacional de Artes y Tradiciones Populares  de París, o el célebre Quai Branly, también en la
capital de Francia.

Nuestro Museo, de acuerdo con la Nueva Museología, aplicada con éxito, por ejemplo, en el Museo de la Civilización de Quebec, en Canadá, y en otros importantes museos del mundo, se ocupará de:

 Mostrar desde una perspectiva antropológica la unidad y diversidad de las manifestaciones culturales en España.

 Conservar, proteger y promover el conocimiento del patrimonio etnológico, integrado por todos aquellos testimonios que son o han sido expresión relevante de la cultura española en sus aspectos materiales, sociales o espirituales.

 Potenciar la investigación en el ámbito del patrimonio etnológico español.

 Ofrecer una nueva mirada sobre la experiencia humana que responda a los interrogantes que plantea el mundo contemporáneo e interpele al mismo tiempo al ciudadano, fomentando su participación activa.

“Nuestra más dulce existencia es relativa y colectiva, y nuestro verdadero yo no está por completo en nosotros, ha escrito Tzvetan Todorov”. Por eso, el Museo Nacional de Etnografía debe ser necesariamente un museo de análisis y reflexión acerca de los conceptos de identidad y relatividad cultural.

En un momento histórico de migraciones y contactos culturales a nivel mundial, y con un marco constitucional que reconoce y establece la diversidad de culturas que componen el Estado español como nuestra riqueza patrimonial, la tarea básica del Museo ha de ser explicar y tratar de conservar para el futuro, los elementos materiales y documentales más significativos para la comprensión de patrimonio que nos caracteriza. Al fin y al cabo, no somos —como dice Caro Baroja en su autobiografía Una vida en tres actos— “más que un espejo que refleja todavía un mundo pasado”.

A la vista de esta situación, este nuevo Museo Nacional habrá de servir de síntesis y facilitará la visión unitaria de las diversas formas de cultura que se desarrollan en el conjunto de España. En último extremo, mostrará cómo la piel del tiempo envuelve las formas de vida y las ideas sobre nuestra propia identidad.

El Museo Nacional de Etnografía de Teruel será el templo y la casa donde habite a partir de ahora la rama dorada; el bosque de Nemi, el espejo de Diana tan anhelado por Eneas y visitado después por Turner y Frazer, en uno de los textos fundacionales de la Antropología moderna, y uno de los casos en que, como decía Octavio Paz, la clase ‘etnógrafo’ forma parte de la clase ‘poeta.’”