El Presidente del Gobierno ha visitado las obras de plataforma de la línea Ourense-Santiago de alta velocidad que han alcanzado el 70 por ciento de ejecución

El Presidente del Gobierno ha visitado las obras de plataforma de la línea Ourense-Santiago de alta velocidad que han alcanzado el 70 por ciento de ejecución

27/08/2008

• Se han calado 13 túneles de los 30 previstos, y han concluido 16 de los 35 viaductos incluidos en el proyecto de obra.

• La construcción de la plataforma del eje ferroviario de alta velocidad Orense – Santiago, recibirá ayudas procedentes del Fondo de Cohesión de la Unión Europea, a través del Programa Operativo Fondo de Cohesión – FEDER 2007-2013. La tasa de cofinanciación es del 80%.

• En algunos puntos del recorrido, la inversión en medidas de protección de los ecosistemas y del patrimonio cultural, llega hasta el 23 por ciento del presupuesto del proyecto constructivo.

El Presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero ha realizado hoy una visita a las obras de la línea Ourense-Santiago, incluida en el corredor Norte-Noroeste de alta velocidad, que están siendo ejecutadas por el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), entidad pública empresarial adscrita al Ministerio de Fomento, y que han alcanzado un porcentaje de ejecución del 70 por ciento.
Durante la visita ha estado acompañado por la Ministra de Fomento, Magdalena Álvarez y del Presidente de Adif, Antonio González Marín, con quienes ha podido conocer el avance de las obras que conectarán ambas capitales gallegas.

Tras sobrevolar el trazado desde el punto de inicio de la línea en obras ha mantenido un encuentro con los medios de comunicación sobre la plataforma del viaducto del Saramo, una estructura de 1.485 metros de longitud, el más largo de la línea, incluido en el subtramo VIII: Silleda (Dornelas)-Vedra-Boqueixón.
Las obras del eje Ourense Santiago tienen una longitud de 87,5 kilómetros y su trazado se ha diseñado para doble vía electrificada de alta velocidad con ancho internacional. Se trata de obras de gran complejidad técnica debido a la orografía, y al hecho de que el trazado pasa por ríos, valles, montañas, poblaciones y carreteras, además de otras vías de ferrocarril.
Para salvar la orografía, el proyecto tiene programada la construcción de 30 túneles, que suman una longitud aproximada de 28 kilómetros, de los cuales 4 kilómetros se construirán como túneles artificiales y los 24 restantes como túneles en mina. Hasta el momento se han calado 13 túneles: Coto Formigueiro, San Fiz, Mundín, Piteira, Barro, Outeiro, Abeleda, y Vila; incluidos en el tramo que va de Ourense a Lalín. A ellos se suman los de: Anzo, Vila de Cruces, Carboeiro, Marrozos, y Santiago, en el trayecto entre Lalín y Santiago.
También se construirán 35 viaductos, de los que ya han concluido 16. Concretamente han finalizado la fase de ejecución de tablero los viaductos de: Río Portos, Formigueiro, Valle, Garabanes, viaducto sobre la carretera OU-504, y el que supera en la zona la línea del ferrocarril. Así mismo, han concluido los de Pedriña, Viñao, y los de Abeleda, y Deza, en el trayecto Ourense-Lalín. En el trayecto Lalín- Santiago han concluido la ejecución de tablero de los viaductos de: Rego da Laxe, Faquinitas, Anzo-1, Anzo-2, Saramo, y O Eixo. Los accesos a la capital ourensana, de 1,5 kilómetros de longitud continuan en fase de estudio; mientras que el tramo de Accesos a Santiago de Compostela, de 3,6 kilómetros de longitud, tiene ya adjudicado el contrato de consultoría y asistencia para la redacción del proyecto de plataforma.

El trazado prevé la conexión con la línea de alta velocidad del Eje Atlántico, y conectará el subtramo: Boqueixón-Santiago con la Estación de Santiago de Compostela, incluyendo como obras más singulares la ampliación del viaducto de Pontepedriña, de 265 metros de longitud, y la ampliación del paso inferior de la calle Amor Ruibal, de 25 metros de longitud.

Corredor Norte-Noroeste de alta velocidad
La construcción del corredor de alta velocidad entre Ourense y Santiago contribuirá a la vertebración socioeconómica de la comunidad gallega, y reducirá los tiempos de viaje actuales. Así mismo, contribuirá a mejorar la seguridad con la aplicación de nuevas tecnologías y de los sistemas de conducción. Todo, sin olvidar que el vallado a ambos lados de la vía supondrá la eliminación de los pasos a nivel a lo largo de la línea, con la consiguiente mejora para los vecinos que habitan los municipios que recorren el trazado.
Para la construcción de la plataforma del eje ferroviario de alta velocidad Orense – Santiago, Adif va a recibir ayudas procedentes del Fondo de Cohesión de la Unión Europea, a través del Programa Operativo Fondo de Cohesión – FEDER 2007-2013. La tasa de cofinanciación es del 80%.
Actuaciones medioambientales y protección del Patrimonio El Plan Estratégico de Adif, identifica como uno de los tres principios esenciales de la identidad de la empresa el ser social y medioambientalmente responsable. Por ello, incorpora una serie de medidas tendentes a respetar escrupulosamente el ecosistema de las zonas por las que discurre y a minimizar su impacto visual, sonoro y paisajístico, sin olvidar la protección del patrimonio cultural a lo largo
de todo el trazado. En algunos puntos del recorrido, la inversión llega a alcanzar hasta el 23 por ciento del presupuesto del proyecto constructivo.


Protección de cauces fluviales
Para la protección de los sistemas fluviales y de la calidad de las aguas se construye un sistema de balsas de hormigón en las bocas de los túneles, en las que se deposita el agua procedente de los cauces subterráneos y de la que se utiliza en las fases de excavación y perforación.
Esta agua se va decantando de una balsa a otra, propiciando que los elementos en suspensión se depositen en los fondos. De este modo, tras la fase de filtrado y la pertinente regulación físico-química, el agua llega a los ríos dentro de los parámetros permitidos por la legislación medioambiental de la Comunidad Autónoma de Galicia, regulada por el organismo Aguas de Galicia y la Confederación Hidrográfica del Norte.
De hecho, y de acuerdo con la normativa en materia de vertidos, se realiza mensualmente el análisis del agua procedente de las balsas, y se controlan los niveles de PH, los sólidos en suspensión, las materias sedimentables, los sólidos gruesos, o la presencia de cualquier otro producto que pudiera alterar la calidad de la misma.
Las balsas, además, se limpian semanalmente, aumentando la periodicidad cuando es preciso. Los lodos resultantes de este proceso de decantación de las aguas se retiran y se depositan para su secado en zonas habilitadas al efecto, para posteriormente ser trasladados a los vertederos legalmente establecidos.
Por otra parte, los ríos pueden verse afectados por efecto de la escorrentía, que se agrava en periodos de temporal. A esta situación contribuye el proceso constructivo al retirarse parte de la cubierta vegetal durante la obra.
Para minimizar los efectos de arrastre hacia el cauce de los ríos, se utilizan varios métodos de vigilancia y control, como la colocación de balas de paja ancladas al terreno, y complementadas con geotextiles que actúan de barrera. Y por supuesto se va reponiendo la cubierta vegetal en las zonas en las que es posible.
También se dispone de balsas de decantación en zonas de escorrentía superficial, y, en ocasiones, se construyen vados provisionales, que se eliminan al término de la obra, y que en todos los casos cuentan con la autorización del organismo encargado de la vigilancia de la calidad de las aguas y los vertidos a los cauces fluviales.

Estas medidas han sido aplicadas en los 26 cauces fluviales, 3 regatos y un arroyo que discurren o se encuentran en el entorno de las obras del Corredor Norte-Noroeste de alta velocidad, en el eje Ourense- Santiago. Lo que se traduce en un total de 64 balsas de decantación construidas, además de 41 depósitos de sobrantes inertes.


Recuperación ambiental e integración paisajística
Los proyectos constructivos contemplan además la recuperación paisajística al término de la obra en todo el corredor, mediante la plantación de especies habituales de zonas húmedas y cursos fluviales, que estén adaptadas al medio para garantizar el éxito de la regeneración del entorno.
Estas medidas incluyen la recuperación de la cubierta vegetal con hidrosiembra de herbáceos y de especies arbóreas propias del entorno afectado, entre ellas: roble albar o carvallo, alisos o abedules, además de especies de menor porte como el espino común, el acebo o los endrinos.
A lo largo del corredor Ourense-Santiago se replantarán algo más de 346 hectáreas de arbolado y arbustos, y cerca de 500 hectáreas con cubierta vegetal. La plantación de árboles, además de recuperar el terreno desbrozado durante las obras, contribuye a hacer de pantalla acústica en algunas de las zonas Respecto a la protección de la fauna, y dado que el trazado de alta velocidad va cerrado, se hace preciso establecer puntos de paso para la fauna, con los que se da permeabilidad al territorio atravesado por la línea. Los proyectos constructivos contemplan la construcción de diversos pasos específicos para los distintos tipos de animales que tienen su hábitat en el territorio.


Protección del patrimonio cultural
A lo largo del trazado de 87,5 kilómetros de longitud ha sido preciso tener en cuenta la existencia de varios elementos de reconocido valor cultural, entre ellos: el hórreo de Carboeiro, el molino de Reguengo, el yacimiento Castriño de Bendoiro, así como otras excavaciones en zonas de protección arqueológica, y el traslado de elementos megalíticos, o el hallazgo y puesta en valor de petroglifos.
Así mismo, en el diseño de las estructuras constructivas se ha tenido en cuenta la presencia de elementos catalogados como patrimonio cultural, tal y como se hizo en el viaducto del río Portos, por su proximidad con “Ponte Ceballos”, o el hórreo inventariado en las proximidades del viaducto del Saramo.


Nota: Se adjunta un croquis y un anexo sobre la situación de las obras.