Comienza la campaña destinada a la vigilancia y control de los 4.000 autobuses escolares que operan en Andalucía
03/02/2020
El delegado del Gobierno de España en Andalucía, Lucrecio Fernández, acompañado por la coordinadora de la Dirección General de Tráfico para Andalucía, Ceuta y Melilla, Ana Luz Jiménez, ha presentado hoy la campaña de vigilancia y control del transporte escolar en Andalucía, que se desarrollará hasta el 7 de febrero y que permitirá detectar cualquier irregularidad tanto de las condiciones del vehículo, como de la documentación y condiciones de los conductores en los autobuses escolares, que alcanzan los 4.000 vehículos en Andalucía, lo que representa un 40% de toda la flota privada en la comunidad autonómica, que asciende a 10.000.
Según ha explicado Fernández, con esta campaña “se intensifican los controles rutinarios y periódicos que realiza la Dirección General de Tráfico a lo largo del todo el año para verificar que estos vehículos cumplen con las condiciones que les son exigidas, comprobando que las autorizaciones y documentos que deben tener dichos vehículos sean los correctos para la prestación del servicio, verificando que las condiciones técnicas y elementos de seguridad del vehículo son los que exige la normativa, y que los requisitos especiales que debe cumplir el propio conductor, como son el permiso de conducción o los tiempos de conducción y descanso, son los correctos”.
El delegado del Gobierno ha recordado que desde 2007 se deniega la matriculación a cualquier autobús que no lleve instalados los sistemas de retención, ya que “la máxima es que los menores vayan correctamente sentados y abrochados o con un dispositivo de retención infantil adecuado a su peso, talla y edad”. “Está comprobado que a 50 km/h, velocidad máxima en vías urbanas, las posibilidades de que un niño sobreviva sin ninguna medida de seguridad son prácticamente nulas, ni siquiera a poca velocidad se garantiza la supervivencia, lo que demuestra que el cinturón de seguridad es sinónimo de vida, ya sea en trayectos cortos, largos, urbanos o interurbanos”, ha insistido Fernández.
No obstante, ha hecho hincapié en que durante esa misma campaña desarrollada el pasado año “ningún conductor dio positivo ni en la prueba de alcoholemia ni en la de drogas y tampoco ninguno de los vehículos fueron denunciados por exceso de velocidad”, lo que pone de manifiesto que la mayoría de las irregularidades son de tipo administrativo.
De hecho, según ha comentado de los datos del pasado año, esta campaña permitió controlar 516 vehículos dedicados al transporte escolar y de menores, de los que 303 vehículos (58,7% del total) fueron denunciados básicamente por irregularidades administrativas, como no disponer de la autorización especial para realizar transporte escolar, caso en el que se englobaron 234 vehículos, el 46,2% del total de vehículos controlados. No tener suscrito un seguro de responsabilidad ilimitado, como exige la ley --81 denuncias (16%)-- y no llevar la señal de transporte escolar, obligatorio cuando se realiza este tipo de transporte --30 de los vehículos controlados (5,9%)-- fueron otros de los motivos de denuncia.
El 90% de los accidentes que se producen durante el transporte escolar tienen lugar en el momento de subir o bajar del vehículo, o justo en los instantes inmediatos, y en muchos casos se trata de atropellos causados por una distracción del menor, del conductor del transporte escolar, o de los padres. “Por ello, la seguridad es la máxima prioridad y las cifras de siniestralidad anuales reflejan que este es un sector seguro”, ha subrayado el delegado del Gobierno.
Recomendaciones
Lucrecio Fernández ha realizado una serie recomendaciones tanto a las empresas del sector como a los conductores y a los padres porque “todos deben conocer sus derechos y obligaciones durante el uso de este servicio”. A las empresas les ha recordado que los pasajeros deben utilizar el cinturón cuando esté disponible e informarles de cómo comportarse en caso de accidente y ofrecer consejos de seguridad. A los usuarios, les ha recordado que deben escoger autocares que incorporen cinturones de seguridad y evitar ponerse de pie durante un desplazamiento, mientras que a los padres les ha pedido que exijan a las AMPAS que comprueben la seguridad de los autocares de transporte escolar, soliciten al centro la contratación de autocares con cinturones y se aseguren de que un monitor acompaña a los niños/as durante el trayecto.
Por último, Lucrecio Fernández ha apostado por crear una red de Caminos Escolares Seguridad que faciliten el desplazamiento hasta las escuelas a pie, en bicicleta o en transporte público, siguiendo los objetivos de la Estrategia Española de Seguridad Vial 2011-2020, iniciativa de la Dirección General de Tráfico (www.caminoescolarseguro.com)