El delegado del Gobierno en Canarias confirma que las obras en la Playa del Castillo cumplen los plazos
20/01/2016
El delegado del Gobierno en Canarias, Enrique Hernández Bento, ha confirmado que las obras para el acondicionamiento y recuperación de la Playa del Castillo, en Caleta de Fuste, Fuerteventura, se están llevando a cabo conforme a los plazos establecidos.
Los trabajos incluidos en este proyecto ya se han iniciado con el desarrollo de la primera de las unidades en la que se divide la obra, consistente en la excavación de la roca. La segunda unidad de este proyecto de regeneración de esta playa supone la aportación de arena, que se realizará a continuación, y en ningún caso tendría que suponer un retraso en los trabajos que el contratista deba obtenerla de otro lugar distinto a los fondos de la dársena de Puerto del Rosario como inicialmente estaba previsto. El volumen de arena necesario para la recarga de esta playa es de 100.000 metros cúbicos.
El proyecto de acondicionamiento que lleva a cabo en esta zona del litoral del municipio de Antigua el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, a través de la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar, supone una inversión de 1.966.059 euros, que será cofinanciada por el Cabildo.
Esta playa, encajonada entre el puerto de Caleta de Fuste y un saliente rocoso al sur, presenta una gran afluencia de público por encontrarse en una de las zonas turísticas de la isla. La playa del Castillo, en su origen, era una pequeña caleta de arena, abrigada prácticamente a todos los temporales, por la existencia de un “bajo” que discurre desde la “punta” del mismo nombre en el sentido Este-Oeste.
La playa, en su situación actual, tiene un uso para baños restringido sólo con mareas medio-altas, a pesar de sus condiciones inmejorables en cuanto a oleaje, al estar, totalmente abrigada.
El objetivo de esta obra es, a partir de la configuración existente de la playa, acondicionarla de manera que sea utilizable para baños en todas las mareas y, al mismo tiempo, redefinir la “playa seca” en todo el borde de la caleta, de forma que la playa adquiera la superficie adecuada para acoger y dar servicio al área turística desarrollada en su entorno.
El proyecto contempla la excavación de la rasa rocosa intermareal en aproximadamente un metro de espesor, para posteriormente aportar arena, eliminar la discontinuidad que el acceso al mar presenta actualmente generando un perfil suave de arena y mejorar el uso para baños en la bajamar.