La mayor operación contra el tráfico de seres humanos en Melilla concluye con cuatro nuevos detenidos.

La mayor operación contra el tráfico de seres humanos en Melilla concluye con cuatro nuevos detenidos.

28/03/2009

La Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía, han dado por concluida la denominada operación “Gaviota”, desarrollada en Melilla bajo al dirección y supervisión del Juzgado de Instrucción número UNO, y que ha dado como resultado la desarticulación completa de la mayor organización dedicada al tráfico de seres humanos realizada hasta ahora en la ciudad.
 
            La investigación, enmarcada en el análisis y fijación de objetivos de los vehículos que acceden a Melilla con inmigrantes ocultos en dobles fondos se inició a finales del mes de julio de 2008.
            La primera fase de la operación se llevó a cabo a mediados del mes de enero de este año, mientras que la segunda ha culminado hace unos días con la detención de cuatro personas, todas residentes en Melilla con edades comprendidas entre los 20 y 30 años. Las cuatro han pasado ya a disposición judicial.
            El resultado final de la operación “Gaviota” se salda con la identificación plena de una treintena de personas integrantes de la organización,  veintiún detenidos y un imputado.
  El resultado  obtenido en esta segunda fase, ha sido producto de las labores de investigación realizada por ambos Cuerpos  de seguridad sobre los objetos, documentación y pertenencias obtenidos en los registros domiciliarios que se llevaron a cabo a durante la primera fase de explotación a mediados de enero.
 
MODUS OPERANDI
 
 La organización se dedicaba de forma continua al pase a Melilla de inmigrantes de origen subsahariano en dobles fondos de vehículos. Estaba formada por personas de nacionalidad española y marroquí. Que asumían cada una de ellas su rol a ambos lados de la frontera. En Marruecos, concretamente, en las localidades fronterizas de Farhana y Beni Enzar, lugares donde se captaban a las víctimas de este tipo delictivo y se preparaban los vehículos para introducir en habitáculos infrahumanos a los inmigrantes que se jugaban la vida al intentar cruzar la frontera hacia Melilla ocultos en los dobles fondos practicados.
 
            En este sentido, han sido muchas las ocasiones en las que se han detectado episodios de inmigrantes subsaharianos que al ser extraídos de los dobles fondos mostraban evidentes síntomas de asfixia, quemaduras, mareos e, incluso, mujeres embarazadas que han visto peligrar su estado de gestación debido a las  situaciones extremas en las que han sido transportadas.
           
 Las personas que se encargaban de adquirir los vehículos para su posterior preparación mediante la practica del doble fondo, eran los propios dirigentes de la red en Melilla, mientras que los conductores-titulares de los vehículos captados por esta mafia eran personas de escasos recursos económicos, algunas de ellas drogodependientes y otras con antecedentes penales y estancia en establecimientos penitenciarios, predominando entre todos su precaria situación económica y su “urgente” necesidad de dinero.
           
 Durante el transcurso de la operación, algunos conductores y vehículos de la Organización fueron interceptados por las Fuerzas de Seguridad marroquíes en su labor diaria de fiscalización y control de los vehículos de Melilla que procedían a la reentrada en el vecino país, permaneciendo sus conductores aun en prisión en Marruecos.
 
     DETENIDOS
 
Las personas detenidas a lo largo de la operación han sido veintiuna, todos ellos varones con edades que oscilan entre los 20 y los 80 años.
 Diecinueve son de nacionalidad española y otros dos marroquí, pero con tarjeta de residencia en nuestra ciudad.
 
 
 A todos los miembros de esta red se les imputa un  delito contra el derecho de los ciudadanos extranjeros, tipificado en el actual Código Penal y pueden llevar aparejadas penas de hasta 8 años de cárcel, viéndose agravado en este caso por el delito de asociación ilícita.
           
 La investigación ha sido fruto de la estrecha colaboración y sincronización entre ambos Cuerpos Policiales, concretamente la UCRIF de la Jefatura Superior del Cuerpo Nacional de la Policía y la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla, los cuales han trabajado durante más de nueve meses demostrando una capacidad y una profesionalidad intachable para combatir y frenar el tráfico de seres humanos en nuestra ciudad.