La Guardia Civil y la Policía Nacional liberaron el año pasado a 36 víctimas de redes de trata de seres humanos en el País Vasco

La Guardia Civil y la Policía Nacional liberaron el año pasado a 36 víctimas de redes de trata de seres humanos en el País Vasco

15/02/2021

Balance 2020

  • Las Fuerzas de Seguridad del Estado se incautaron en 2020 de 43 kilos de cocaína, 277 kilos de marihuana y casi 4.000 kilos de cogollos de marihuana
  • La Policía Nacional neutralizó dos células yihadistas y detuvo a cinco personas dedicadas a captar y reclutar nuevos integrantes para la organización terrorista Daesh
  • El Delegado del Gobierno Denis Itxaso destaca la  coordinación policial entre los diferentes cuerpos que operan en la comunidad para hacer frente a la pandemia

 

La Guardia Civil y la Policía Nacional lograron liberar el año pasado en Euskadi a 36 víctimas de redes de trata de seres humanos, en su mayoría mujeres y niñas. La trata de personas es el tercer negocio más lucrativo del crimen organizado en el mundo, sólo por detrás del narcotráfico y de la falsificación. Estos datos forman parte del balance 2020 de actividades de la Policía Nacional y la Guardia Civil que hoy ha presentado el Delegado del Gobierno en el País Vasco, Denis Itxaso, quien ha estado acompañado por el Jefe Superior de Policía del País Vasco, José Moisés Pérez Cornejo y el General Jefe de la Zona de la Guardia Civil, Antonio Campos Vivancos.

Sobre las víctimas de redes de trata, el Delegado ha subrayado que “constituye una de las violaciones de derechos más graves que siguen produciéndose en pleno siglo XXI”. El perfil de las víctimas es principalmente femenino ya que mujeres y niñas están expuestas a un mayor riesgo de ser victimizadas, especialmente aquellas en situaciones de especial vulnerabilidad vinculadas a la pobreza, conflictos armados o inestabilidad política. La Policía Nacional desmontó 14 grupos delictivos relacionados con esta lacra.

Junto a la liberación de las víctimas de trata, en el balance conjunto de ambos cuerpos destacan la detención de 312 personas por la comisión de algún tipo de delito y la desarticulación de 21 bandas de delincuencia organizada. También son reseñables las operaciones de incautación de drogas: La Guardia Civil confiscó 4.932 kilos (casi 4.000 fueron de cogollos de marihuana) y la Policía Nacional, 81,7. En total, más de 5.000 kilos. Además, la Policía Nacional neutralizó dos células yihadistas dedicadas a captar y reclutar nuevos integrantes para la organización terrorista Daesh. El Delegado destacó “la permanente formación de los agentes de ambos Cuerpos para hacer frente a las nuevas formas de delincuencia y terrorismo”, como es el caso de las células yihadistas desarticuladas.

Coordinación policial

2020 ha sido un año marcado por la pandemia, también a efectos de delincuencia, ya que durante los meses de confinamiento, cuando se declaró en España el Estado de Alarma por la Covid-19, se produjo un descenso, según las FSE.

Durante ese primer estado de alarma y los meses duros de confinamiento estuvo totalmente activo el Centro de Coordinación Operativo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad (CECOR-COVID 19), integrado por Guardia Civil, Policía Nacional, Ertzaintza, policías locales y Defensa. Es el principal órgano de coordinación entre cuerpos policiales en el marco del estado de alarma y tiene como objetivo garantizar la unidad de acción entre los distintos cuerpos en la aplicación de las medidas adoptadas. Las reuniones desde marzo hasta mayo fueron quincenales y permitieron coordinar el trabajo de todos los cuerpos. Sobre el CECOR, el Delegado ha valorado “la eficacia y el buen funcionamiento” de este mecanismo de coordinación y “la profesionalidad y trabajo desarrollado por las fuerzas de seguridad del Estado, la Ertzaintza y las policías locales” para aplicar las medidas derivadas del estado de alarma.

Droga escondida en muebles

En el caso de los delitos relacionados con la droga, la Guardia Civil (en el ejercicio de sus competencias como policía judicial) ha incautado cuatro toneladas de cogollos y 14.000 plantas de marihuana y ha desmantelado 13 naves de cultivo indoor. Además, en el aeropuerto de Loiu ha requisado otros 15 kilogramos de cocaína, 7,2 de hoja de cocaína y 32 de marihuana. Mientras, en el Puerto de Bilbao ha intervenido 14 kilos de cocaína con destino a Irlanda y otros 185 kilos de marihuana con destino a Reino Unido. Con relación a esta última operación, los agentes identificaron en el ferry que une el puerto de Bilbao con el de Portsmouth en un transporte de mudanzas internacional una partida de muebles que procedía del sur de España y que les resultó sospechosa. En el interior de estos muebles se ocultaban una gran cantidad de paquetes que contenían marihuana envasada al vacío.

Por su parte, la Policía Nacional se incautó de un total de 81,7 kilos de sustancias estupefacientes (entre ellas, 16 kilos de heroína y 60 de marihuana) y 1.386 plantas de marihuana.

En conjunto, las FSE han intervenido 43,3 kilos de cocaína y 277 kilos de marihuana, a los que añadir 4.000 kilos de marihuana, en lo que se refiere a las drogas de mayor relevancia.

Delitos de odio y homenajes a miembros de ETA

La Guardia Civil también  descubrió un zulo de ETA en Álava y las investigaciones sobre el tráfico ilícito de armas permitió la incautación de 49 cortas, 9 largas, 5 subfusiles, 2 ametralladoras, así como abundante munición para dichas armas y 2 granadas de mortero.

En el ejercicio de sus competencias de intervención de armas y explosivos, la Guardia Civil en Euskadi  concedió 60.270 licencias, autorizaciones y revistas de diferentes tipos de armas y realizó 764 inspecciones a instalaciones y establecimientos sujetos a control administrativo —fábricas de armas o explosivos, depósitos, talleres, campos de tiro o empresas de seguridad, entre otros—. Asimismo tramitó 69 denuncias por infracciones relacionadas con diferentes clases y categorías de armas.

Durante el control de fronteras y vigilancia de puertos, interceptó a 263 migrantes clandestinos, 216 en el de Bilbao y 47 en el de Pasaia. Cabría destacar que las intrusiones de estos migrantes clandestinos han disminuido un 75,65 % con respecto a 2019.

Y en la vigilancia de puertos y aeropuertos, la Guardia Civil ha realizado un total de 5.243 inspecciones de la mercancía que ha llegado al Puerto de Bilbao y al de Pasaia. 1.836 análisis de manifiestos de carga en buques atracados, 1.743 inspecciones de contenedores en los diferentes almacenes del recinto portuario y 1.664 inspecciones de contenedores con camión escáner de Agencia Tributaria. Derivadas de dichas inspecciones y de las irregularidades detectadas, se han formulado 267 denuncias.

Unidad para vigilar drones

Además, la Guardia Civil, en sus funciones de Resguardo Fiscal del Estado en el recinto aduanero de aeropuertos, levantó 404 actas de aprehensión, incautándose un total de 5.270 cajetillas de tabaco, 550,38 Kg. de productos cárnicos y lácteos, 77,95 Kg. de productos farmacéuticos y cosméticos, 1.045 Kg. de semillas, plantas y productos vegetales, 56 objetos, figuras y partes de animales y  1.649 artículos de ropa, calzado, marroquinería o material telefónico.

La Guardia Civil cuenta desde enero del año pasado con una unidad para vigilar drones, las aeronaves pilotadas por control remoto. Se trata de Pegaso, que se dedica a vigilar el espacio aéreo de Bizkaia. Durante su año de funcionamiento, Pegaso ha levantado 58 Infracciones administrativas a la ley de Seguridad Aérea. El denominador común de las sanciones es la falta de autorización, documentación, registro de medios o coordinación para la realización de la actividad aeronáutica.

Mientras, en su labor de vigilancia de costas y salvamento marítimo la Guardia Civil durante el año pasado practicó un total de 474 inspecciones en embarcaciones recreativas y profesionales, en las que se detectaron un total de 144 irregularidades sobre el uso indebido de embarcaciones, titulaciones, pesca profesional y de recreo y la Ley de Puertos.

Se prestó seguridad en 36 pruebas deportivas y se remolcaron 25 embarcaciones, auxiliando a sus ocupantes y se participó en 9 búsquedas de desaparecidos en el mar.

Más de 30.000 permisos de residencia expedidos

Por otra parte, la Policía Nacional tiene en el País Vasco competencias exclusivas en materia de extranjería, ámbito en el que expidió durante el año pasado 32.155 permisos de residencia. También tiene las competencias para expedir el Documento Nacional de Identidad (un total de 257.920) y pasaportes (52.771). 

De las 1.571 personas detenidas por la Policía Nacional en 2020, 945 lo fueron por infracciones de la Ley de Extranjería (la mayoría por carecer de permiso de residencia), 142 por diversos delitos y 160 por reclamación judicial. 

Del total de detenidos, 63 de ellos estaban relacionados con redes de inmigración ilegal. El pasado año la Policía Nacional desarticuló varios grupos vinculados a la trata de seres humanos y liberó a 31 víctimas de trata.

Asimismo, detuvo a 6 personas por delitos de terrorismo. Cinco de ellas pertenecientes a dos células yihadistas que reclutaban adeptos para el Daesh. Una de estas células reclutaba mujeres que, una vez adoctrinadas, aceptaban matrimonios polígamos para que su descendencia “aumentase exponencialmente la capacidad operativa del grupo”, según la Policía Nacional. La otra célula se dedicaba a la captación de nuevos integrantes y a su adoctrinamiento en el ideario yihadista. “Ponían especial énfasis en los más jóvenes, alguno de ellos menores de edad”, apunta la Policía.

La otra detención por terrorismo es la de Miren Itxaso Zaldua Iriberri, alias Sahatsa, implicada en el asesinato del presidente del Partido Popular de Aragón, Manuel Giménez Abad, cometido el día 6 de mayo de 2001 en Zaragoza y reivindicado por ETA. Tras cumplir la condena impuesta por las autoridades francesas, fue puesta en libertad y expulsada de Francia en agosto de 2017, quedando en libertad en España al no tener entonces reclamaciones judiciales pendientes. Como resultado del análisis y estudio de la documentación intervenida a la organización terrorista ETA en distintas operaciones policiales se hallaron nuevos indicios que vincularon a la detenida con el atentado que en 2001 acabó con la vida de Manuel Giménez Abad.