Un nuevo intento de salto masivo es controlado con éxito por la Guardia Civil

01/02/2015

Un grupo de unos 400 inmigrantes subsaharianos ha protagonizado esta madrugada un nuevo intento de salto masivo a la valla de Melilla que, finalmente, ha sido controlado con éxito gracias al fuerte dispositivo policial desplegado por la Guardia Civil.
El intento se ha producido sobre las 05.30 h de esta pasada noche, cuando los inmigrantes, tras lanzar piedras contra las fuerzas de seguridad marroquíes, han logrado superarlas y acceder en parte al vallado melillense por la zona próxima a la frontera de Beni-Enzar, que momentáneamente quedó cerrada entra tanto se controlaba el intento de salto.
En torno a un centenar de inmigrantes consigue encaramarse a la vallas exterior e intermedia, pero son contenidos por los agentes de la Benemérita, que ya habían realizado un fuerte despliegue con unidades de la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla y de la Agrupación de Reserva y Seguridad destinadas precisamente a la ciudad como refuerzo en el control fronterizo.
Los inmigrantes encaramados desisten finalmente de su actitud sobre las 07.00 y quedan bajo custodia de las fuerzas marroquíes.
No ha habido heridos ni más detalles reseñables que el auxilio que la Guardia Civil ha tenido que prestar a las fuerzas de seguridad de Marruecos, que incluso piden refugiarse en la zona de entrevallas para resguardarse de las piedras que los inmigrantes lanzaban contra ellos.
El salto de hoy es el tercero que se produce en lo que va de año, tras un intenso mes de enero en el que prácticamente a diario se han registrado avistamientos de grupos muy numerosos –de hasta mil inmigrantes en alguna ocasión- intentando aproximarse a la frontera con Melilla.
Desde la Delegación del Gobierno insistimos una vez más en que este modelo de inmigración, auspiciado y alentado por las mafias que trafican con seres humanos, no es admisible ni justificable bajo ningún concepto y en ningún caso debe confundirse con los flujos de inmigrantes que huyendo de conflictos bélicos solicitan prácticamente a diario asilo o refugio en el puesto fronterizo de Beni-Enzar.